Poco en juego, grandes expectativas: China revela sus nuevos objetivos climáticos

China anunció su nuevo plan de acción climática en una reunión de la ONU, el primer compromiso que incluye objetivos absolutos para reducir los gases que calientan el planeta.
El texto establece el objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero entre un 7% y un 10% para 2035.
Esto es lo que se sabe hasta ahora:
– ¿Por qué importa? –
China es la segunda economía más grande del mundo y, desde 2006, el país más contaminante. Actualmente es responsable de casi el 30% de las emisiones globales. Paradójicamente, también es un importante generador de energía limpia, ofreciendo al mundo sus paneles solares, baterías y coches eléctricos.
El camino que adopte Beijing será crucial para determinar si el mundo puede limitar el calentamiento a 1,5 °C, el umbral que los científicos de la ONU consideran necesario para evitar los impactos más catastróficos de la alteración del clima.
Según el Acuerdo de París, los países deben actualizar sus objetivos cada cinco años. Con la principal cumbre climática que se celebrará en Brasil en menos de dos meses, la COP30 en Belém, Pará, las expectativas son altas.
El compromiso de China para 2021 fue alcanzar su punto máximo de emisiones de dióxido de carbono antes de 2030 y lograr la neutralidad de carbono para 2060, pero carecía de objetivos numéricos a corto plazo, lo que frustró a los observadores internacionales.
El contexto geopolítico ha aumentado la presión: bajo el mandato de Donald Trump, Estados Unidos ha vuelto a abandonar el Acuerdo de París. El líder republicano considera el cambio climático un "fraude". Además, la fragmentada Unión Europea aún no ha fijado un nuevo objetivo.
– ¿Qué dice el plan? –
Con el nuevo plan, China se compromete a reducir las emisiones netas de gases de efecto invernadero en toda la economía entre un 7 % y un 10 % con respecto a los niveles máximos. Además, se compromete a esforzarse por mejorar.
Se cree que China alcanzó su pico de emisiones en 2025. Los analistas han indicado que para alinearse con el objetivo de 1,5 °C, Beijing necesitaría reducir sus emisiones en aproximadamente un 30 % durante la próxima década con respecto a los niveles de 2023.
En comparación, Estados Unidos alcanzó su pico de emisiones de CO2 en 2007 y las redujeron aproximadamente un 14,7% una década después.
China debe aumentar la proporción de combustibles no fósiles en el consumo total de energía a más del 30%. También debe ampliar la capacidad eólica y solar a más de seis veces los niveles de 2020, alcanzando los 3.600 gigavatios.
Otros puntos incluyen aumentar la cobertura forestal a más de 24 mil millones de metros cúbicos y convertir los vehículos eléctricos en la principal venta de automóviles nuevos.
– ¿Qué opinan los expertos? –
Los observadores coinciden en que los objetivos son demasiado modestos, pero señalan que China probablemente los alcanzará gracias a su próspero sector de tecnología limpia.
"Este objetivo de 2035 ofrece pocas garantías de que mantendremos nuestro planeta seguro, pero lo que es esperanzador es que la descarbonización real de la economía china probablemente superará su objetivo en papel", dijo Yao Zhe de Greenpeace East Asia.
Kate Logan y Li Shuo de la Asia Society destacaron la frase de que China “se esforzará por hacerlo mejor”.
“Esta frase al menos envía una señal positiva de que Beijing está potencialmente abierto a revisar su compromiso sobre el papel en función de su progreso real”, escribieron.
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IstoÉ