Te explicamos por qué ya no hay atún en el menú del comedor escolar de Mouans-Sartoux.

Pronto se cumplirá un año desde que la asociación Bloom reveló el alcance de la contaminación del atún con mercurio. Un metal neurotóxico clasificado por la Organización Mundial de la Salud como una de las diez sustancias más preocupantes para la salud pública.

Al igual que otras siete ciudades francesas (Bègles, Grenoble, Lille, Lyon, Montpellier, París y Rennes), Mouans-Sartoux ha decidido tomar medidas: el atún está simplemente excluido de los menús de los comedores.

Estos ocho municipios piden a los políticos nacionales y europeos, así como a la industria atunera, que actúen para proteger a los consumidores, especialmente a los niños.

« Dejamos de consumir atún como medida de precaución para proteger la salud infantil », explica Gilles Pérole, subdirector de alimentación en Mouans-Sartoux, líder de comedores 100 % orgánicos. «Otros municipios han hecho lo mismo. Decidimos informar sobre el tema y, sobre todo, concienciar a las familias sobre sus prácticas personales».

Sustituido por sardina

Según un estudio de la asociación Bloom, comer sólo una lata de atún puede ser suficiente para superar la ingesta semanal tolerable para un niño.

"El mercurio es especialmente nocivo durante el embarazo y en la formación del cerebro de los jóvenes", advierte el responsable electo.

Los riesgos son conocidos: menor coeficiente intelectual, trastornos neuromotores, deterioro de la memoria y del comportamiento, etc.

El objetivo es alertar a otras comunidades, ya que existe un problema de salud pública, pero también a los padres y a las autoridades públicas a nivel nacional o europeo para que modifiquen las normas. Hasta la fecha, ni el Estado ni la Unión Europea han tomado ninguna medida.

" Vemos claramente que las cuestiones económicas priman sobre las sanitarias y medioambientales ", lamenta Gilles Pérole. " Eso es lo que tenemos que cambiar".

Las ocho ciudades piden a los Ministerios de Salud y Agricultura prohibir la comercialización de productos de atún que superen los 0,3 mg/kg de mercurio a nivel nacional.

« Si el Estado no lo hace, nosotros, las autoridades locales y los consumidores, podemos hacerlo », cree. En los comedores de Mouans, las sardinas han sustituido al atún.

" Así de simple ", continúa. "El estándar es de 0,3 mg por kilo de sardina, mientras que para el atún es de 1 mg, tres veces más. Las familias comprendieron el enfoque y lo acogieron con agrado".