Siente el terror en Panic Park 2025

Octubre es el mes de los espantos, el horror, las festividades asociadas con el miedo, y las tradiciones culturales que nos hacen recordar a los que ya no están. El terror también se vive y se celebra en Guadalajara, y este año Panic Park regresa con más actividades terroríficas, espantos, monstruos, diversión, experiencias inmersivas, y pánico pensado para todos los miembros de la familia.
A diferencia de las tradicionales casas del terror, Panic Park propone una experiencia de gran formato, con múltiples escenarios, laberintos oscuros y personajes que acechan en cada esquina. La intención no es únicamente provocar el susto inmediato, sino sumergir al visitante en una atmósfera inquietante que mezcla lo teatral, lo cinematográfico y lo interactivo.
Para su edición 2025, Panic Park se apodera de uno de los espacios que fue emblemático en Guadalajara: el Bolerama Minerva, que por muchos años ha sido un edificio abandonado, y que hoy es revivido para llevar a los tapatíos por una experiencia de espanto a través de un boliche retro, emulando las películas de terror de los años ochenta.
No solo eso, sino que entre las atracciones se incluirán “La casa de los gritos”, “Sanatorio”, “Invisible”, “King’s Nightmare”, y “Gotcha Transilvania”, todo dentro de las instalaciones de lo que alguna vez fue el Bolerama Minerva.
“Lo que hemos hecho es mimetizarnos con los espacios que vamos presentando con temática de terror. Entonces, el Bolerama nos da una perspectiva de los 80 y, a partir de eso, hicimos una atracción que se llama 80’s Bowling Hell, donde pasamos películas, muchas de ellas también de los 80. A diferencia de otros años, en esta ocasión hay seis atracciones”, comparte Santiago Valencia, director general de Panic Park, platicando con EL INFORMADOR sobre esta nueva experiencia de terror tapatía.
“Una de estas es ‘La casa de los gritos’, o sea, de ‘La Llorona’. Para entrar al parque temático tendrás que hacerlo por la casa de ‘La Llorona’ y tener alguna experiencia con ella. Y ya dentro, tenemos al ‘Hombre Invisible’, que es una experiencia con audio binaural que generaron los estudios Universal para la película y luego quedó establecida. En realidad, es un teatro: entras a lo que parece un teatro abandonado, hacemos un blackout, te colocas los audífonos y todo sucede a través del audio y lo que tu cabeza se va imaginando. Es muy impresionante”.
Que el Panic Park 2025 sea en el viejo Bolerama genera expectativa, pues es como ocurre siempre en las películas de terror. Para Santiago Valencia no podía haber un mejor lugar: “Por experiencia, creo que es importante que no sean sitios fuera de la ciudad. Y entendiendo los procesos del terror o del miedo, lo mejor son espacios abandonados, que tengan alguna historia o un aire siniestro por sí mismos”, dice.
El Bolerama ha sido condicionado para que la atmósfera sea de pesadilla, con sets escenográficos; cuando llegaron, todavía había pinos de boliche, bolas polvorientas, y un lugar cargado de energías. Pero Panic Park no se queda solo en los sustos. Pensada como una actividad para toda la familia, una de sus apuestas más atractivas es la integración de un ambiente de festival: música con DJ en vivo, zonas de gastronomía, concursos y espacios de convivencia que convierten la visita en una experiencia social. Esta mezcla lo ha posicionado como una de las citas imperdibles de la temporada de Halloween y Día de Muertos en Guadalajara.
“No es una sola casa de terror: son seis casas y además hay áreas comunes, donde los papás pueden esperar y los niños entrar y salir de las atracciones”, explica Santiago. “Hay reglas claras: los actores no pueden tocar al público y viceversa. Tenemos cámaras en todos los espacios y revisamos constantemente los recorridos. Cuidamos mucho la experiencia y la emoción de las personas. Este año abrimos a las 4:00 de la tarde, porque el lugar lo permite. Antes abríamos a las 7:00 de la noche, pero pensamos en atraer a un público más joven”.
El parque también busca innovar en cada edición, presentando nuevas atracciones y temáticas para que la experiencia no se repita. Esto atrae tanto a los curiosos que lo visitan por primera vez como a quienes ya se han vuelto fanáticos y regresan para enfrentarse a nuevos escenarios y criaturas. Además de la experiencia de boliche, Panic Park 2025 homenajeará a Stephen King, donde se emulará el hotel de “El resplandor”, y donde en cada habitación aguardará una pesadilla. También habrá un gotcha, donde el visitante entrará a un mundo postapocalíptico con la intención de matar a un vampiro, mientras tienen que huir de francotiradores zombis.
“Somos un equipo de locos”, bromea Santiago, respecto a cómo nacieron las ideas para Panic Park 2025. “Además, el mismo lugar nos va perfilando lo que hacemos. Son juntas muy divertidas, y la construcción misma de los escenarios también nos va inspirando para definir detalles de cada atracción”.
El éxito del miedo compartidoPanic Park ha demostrado que el miedo también puede ser un vehículo de diversión colectiva. Parte de su atractivo radica en cómo los visitantes enfrentan juntos la adrenalina de lo desconocido, compartiendo gritos, risas y fotografías que se convierten en recuerdos inolvidables.
En un contexto donde Guadalajara se consolida como un epicentro cultural y de entretenimiento, Panic Park suma una nueva dimensión a la oferta de la ciudad: la del terror inmersivo, un género que cada vez gana más adeptos y que promete crecer en próximas ediciones. Para quienes buscan una experiencia distinta durante el otoño, Panic Park se presenta como una opción que va más allá de la típica noche de brujas. Aquí, la oscuridad, los monstruos y la adrenalina se combinan con la convivencia y el espectáculo para ofrecer una cita que pone la piel de gallina y que, sin duda, se convertirá en tradición.
Panic Park 2025 iniciará actividades el próximo 11 de octubre en el ex Bolerama Minerva; cuyas actividades están recomendadas para niños mayores a 10 años. Boletos desde 400 pesos, estudiantes con credencial 300 pesos.
CT
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