La postura que debes evitar al hablar en público, según un experto en comunicación

Transmitir un mensaje efectivo no solo depende de las palabras que usamos, sino también de cómo nos presentamos ante los demás. La postura corporal, el tono de voz y los gestos pueden ser tan influyentes como el contenido de un discurso. Así lo explica Fernando ‘Fer’ Miralles, destacado experto en oratoria y ganador de múltiples premios en comunicación, quien recientemente compartió un valioso consejo en su cuenta oficial de TikTok que ha causado revuelo entre sus seguidores.
En su video, que ya acumula miles de reproducciones, Miralles señala que una postura comúnmente adoptada por muchas personas al hablar en público, conocida como la “postura de poder”, puede ser más perjudicial que beneficiosa. Esta postura, que consiste en colocar las manos en la cintura con los codos hacia afuera, se asocia con una sensación de dominio y seguridad para quien la adopta, pero según el experto, proyecta un mensaje equivocado hacia la audiencia. “Sí, te sentís más fuerte, más firme. Pero si yo me planto frente a la audiencia con las manos en la cadera, ¡parece que voy a pegar un puñetazo! Parece que estoy cargando”, bromeó Miralles en el video, subrayando que esta posición puede resultar intimidante y generar incomodidad en quienes lo observan.
El especialista explicó que, aunque esta postura puede hacer sentir a la persona más segura, el efecto que produce en los demás es el opuesto: una imagen de rigidez o incluso agresividad. Esto puede ser un obstáculo importante si el objetivo es conectar con la audiencia y generar un ambiente de cercanía y confianza. En lugar de la “postura de poder”, Miralles recomienda ensayar y adoptar una postura relajada, abierta y natural que transmita seguridad sin parecer prepotente.
Para lograrlo, el experto sugiere herramientas simples pero efectivas. Una de ellas es practicar frente al espejo antes de una presentación, observando cómo se percibe la postura y ajustándola según sea necesario. Otra técnica es pedir a alguien de confianza que observe y brinde una devolución honesta sobre las impresiones que genera la postura: ¿transmite confianza, nerviosismo, empatía? Según Miralles, este ejercicio puede marcar una gran diferencia en la forma en que el mensaje se recibe.
“Hablar en público no es solo decir cosas. Es también saber cómo las decimos”, enfatizó el orador, recordando que la comunicación efectiva es una combinación de contenido y lenguaje no verbal. Este enfoque ha resonado con cientos de personas que comentaron en su video, compartiendo experiencias personales sobre el impacto de esta postura en sus relaciones laborales y personales. Algunos usuarios mencionaron que la postura de poder es un hábito inconsciente que han visto adoptar a jefes o colegas, y otros reflexionaron sobre cómo esta posición puede influir en las percepciones de los demás. Comentarios como “Mi jefe lo hace continuamente” y “Sentirse bien es también importante para que los demás te vean con seguridad” fueron recurrentes entre los seguidores.
El consejo de Miralles es un recordatorio de que la comunicación no se limita a lo que decimos, sino que incluye cómo lo decimos y cómo nos presentamos. Trabajar en nuestra postura y lenguaje corporal puede ser la clave para transmitir un mensaje poderoso y lograr que la audiencia no solo escuche, sino también conecte.
Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de La Nación.
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