Seleccione idioma

Spanish

Down Icon

Seleccione país

Mexico

Down Icon

Sorprendente: alimentos que mejoran su aporte nutricional al ser congelados

Sorprendente: alimentos que mejoran su aporte nutricional al ser congelados

¿Usted es de las personas que congelan los alimentos? Esta información le interesa.

IStock

Durante años ha persistido la creencia de que los alimentos congelados son menos valiosos nutricionalmente que los frescos. Sin embargo, cada vez más expertos en salud y bienestar desmienten este mito, destacando que la congelación no solo preserva vitaminas y minerales, sino que también representa una alternativa práctica para mantener una dieta equilibrada y reducir el desperdicio alimentario en el hogar.

Lea también: (Este es el tema del que siempre habla alguien que no es sociable, según la IA)

Una especialista en salud intestinal lo resume así: “Las verduras congeladas suelen ser igual o incluso más nutritivas que los productos frescos que han pasado mucho tiempo en transporte y almacenamiento antes de llegar a la cocina”. Esta afirmación replantea la percepción tradicional y refuerza la utilidad de los alimentos congelados en la rutina diaria.

Expertos subrayan que los vegetales congelados conservan sus nutrientes al ser sometidos a procesos de congelación rápida poco después de la cosecha, lo que, en muchos casos, les permite mantener un perfil nutricional superior al de aquellos productos frescos que han pasado por largas cadenas de distribución.

Espinacas: mayor disponibilidad de nutrientes

Las espinacas son un excelente ejemplo

. Si bien las frescas son ricas en fibra, vitaminas A, C y K, hierro, folato y potasio, tienen una vida útil muy limitada. Al congelarse, no solo se prolonga su conservación, sino que se facilita su uso en la cocina. Además, al cocinarlas se elimina el ácido oxálico, un compuesto natural que interfiere en la absorción de minerales como el hierro y el calcio. Por eso, consumir espinacas congeladas y cocidas permite aprovechar mejor sus propiedades nutricionales.

Arvejas: proteínas y vitaminas al alcance

Las arvejas comienzan a perder valor nutritivo desde el momento en que se cosechan. Por eso, si no se consumen inmediatamente, lo más recomendable es optar por su versión congelada. Ricas en proteínas, vitaminas A, C y K, fibra y ácido fólico, las arvejas congeladas mantienen sus beneficios intactos por más tiempo.

Lea también: (Los 3 hábitos que se están robando toda su energía y quizá no lo nota: cómo combatirlo)

Moras: antioxidantes asegurados todo el año

Las moras y otras frutas del bosque son reconocidas por su alto contenido en antioxidantes, fibra, vitaminas y minerales. Cuando se congelan poco después de la cosecha, logran preservar estos compuestos esenciales. Esto permite disfrutar de sus beneficios nutricionales durante todo el año, incluso fuera de temporada.

Maíz: más antioxidantes y mejor absorción

El maíz, cuya cosecha tiene una ventana corta, es fuente de folato, tiamina, vitamina C, magnesio y potasio. Al congelarlo y cocerlo al vapor, no solo se conservan estos nutrientes, sino que se mejora la biodisponibilidad de antioxidantes como la luteína y la zeaxantina, clave para la salud visual y de la piel.

PORTAFOLIO

Portafolio

Portafolio

Noticias similares

Todas las noticias
Animated ArrowAnimated ArrowAnimated Arrow