Santana vuelve a encender el Palau Sant Jordi 25 años después de ‘Supernatural’

Después de veinte años de ausencia, el inconfundible sonido de la guitarra de Carlos Santana volvió a sonar anoche en Barcelona. Su Oneness Tour —una gira que refleja la profunda filosofía espiritual y musical de la banda— hizo escala en el Palau Sant Jordi, dentro del festival Guitar BCN. Sin grandes presentaciones ni preámbulos, pasadas las nueve de la noche, una percusión hipnótica dio paso al electrizante pulso musical de Santana, que abrió el concierto con Soul Sacrifice , el tema que lo consagró en Woodstock en 1969. Con su sombrero blanco, la mirada cabizbaja, mascando chicle y a ratos de espaldas al público, el músico tocó con absoluta concentración, mientras las pantallas evocaban escenas del festival.
La banda liderada por el guitarrista mexicano ofreció un espectáculo cargado de misticismo, impregnando el recinto con su fusión de sonidos caribeños, ritmos afro-latinos y espíritu rockero: la fórmula que cimentó su leyenda. Auroras boreales, humos de colores y cantos tribales envolvieron al público diverso, que clamaba con entusiasmo por el eterno artista en escena.
El 'Oneness Tour' celebra los 25 años de Supernatural con himnos como 'Maria Maria' y 'Corazón espinado'Los primeros temas del repertorio —un set de 18 canciones— se centraron en su trilogía fundacional: Santana (1969), Abraxas (1970) y Santana III (1971). Sonaron clásicos como Jin-Go-Lo-Ba , Evil Ways y el medley de Black Magic Woman con Gypsy queen sostenidos por el entramado percusivo de Paoli Mejías, Karl Perazzo y Cindy Blackman, esposa del guitarrista y reconocida baterista que también ha acompañado en sus giras a Lenny Kravitz.
El Oneness Tour celebra el 25º aniversario de Supernatural , el disco que marcó el regreso triunfal de Santana en 1999 y le otorgó un reconocimiento masivo que revitalizó su carrera con una chispa inesperada. Esa misma chispa encendió el Palau Sant Jordi cuando sonaron los primeros acordes de Maria Maria y el público, que hasta el momento había permanecido sentado, se levantó al instante. De aquel álbum también interpretaron Corazón Espinado , Yaleo y Put your lights on .

El músico mexicano Carlos Santana durante el concierto que ha ofrecido en el Palau Sant Jordi de Barcelona, incluido en su ´Oneness Tour´.
Alejandro Garcia / EFEHubo momentos de gran energía, como con Oye como va , pero también se vivieron instantes más pausados con canciones como la versión de She’s not there de The Zombies. El guitarrista de 78 años, aunque en ocasiones se tomó un respiro sentado sobre el escenario, nunca dejó de expresar su arte a través de sus dedos, que se deslizaron con maestría y fluidez por la guitarra. La formación que lo acompañó incluyó a Cindy Blackman en la batería, mientras que Ray Greene y Andy Vargas destacaron en las voces, Tommy Anthony en la guitarra, Benny Rietveld en el bajo y David K. Mathews en los teclados. Mención especial merece el solo de batería de Blackman cerca del final, que dejó al público hipnotizado con su virtuosismo durante cinco minutos.
Lee tambiénTras casi dos horas, la noche concluyó con Smooth , canción que resuena con fuerza en las distintas generaciones que acompañaron las cinco décadas de Santana. Con emoción, 11.800 personas despidieron ayer a la banda con una ovación que confirmó, una vez más, que su música es eterna. “Estoy convencido de que juntos podemos cambiar el destino del planeta”, expresó el guitarrista.
El festival Guitar BCN se prepara ahora para su nueva temporada de otoño, después de vender más de 90.000 entradas.
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