Las personas que padecen SII podrían aliviar los síntomas combinando dos dietas

Aquellos que viven con el síndrome del intestino irritable (SII) podrían ver una reducción significativa de sus síntomas al adherirse a dos dietas al mismo tiempo.
Por lo general, se recomienda una dieta baja en FODMAP para quienes padecen SII, la cual se centra en evitar alimentos que puedan empeorar los síntomas. Los FODMAP (oligosacáridos, disacáridos, monosacáridos y polioles fermentables) son carbohidratos específicos que el intestino delgado tiene dificultad para absorber correctamente.
Cuando las personas con SII consumen alimentos FODMAP, pueden experimentar diversos síntomas incómodos, como calambres, estreñimiento, hinchazón, diarrea y exceso de gases. Diversos alimentos comunes se clasifican en la categoría FODMAP, entre ellos:
- Lácteos
- Trigo
- manzanas
- Peras
- Melocotones
- Espárragos
- cebollas
- Ajo
- Frijoles
- Lentejas
Dado que la dieta baja en FODMAP se centra principalmente en evitar ciertos alimentos, puede combinarse con otras dietas que se centran en el consumo de ciertos alimentos también bajos en FODMAP. Por ejemplo, algunos ensayos clínicos han demostrado una correlación positiva entre la adherencia a la dieta mediterránea y una mejoría de los síntomas.
En un ensayo que comparó a 30 personas que no seguían la dieta con 29 que sí la seguían, quienes la siguieron mostraron una mejoría de los síntomas gastrointestinales y psicológicos. Otro estudio piloto de Michigan Medicine, que examinó a 20 participantes, también mostró resultados prometedores similares: las personas que seguían la dieta mediterránea mostraron una mejoría de los síntomas abdominales.
Este estudio reveló que los síntomas mejoraron aún más cuando los participantes adoptaron la dieta baja en FODMAP, en comparación con solo la dieta mediterránea. Dado que ambas dietas muestran efectos positivos sobre los síntomas del SII, es posible adoptarlas simultáneamente para obtener diversos beneficios.
Antes de que quienes viven con SII consideren adoptar la dieta mediterránea junto con su dieta baja en FODMAP, es fundamental tener en cuenta que esta suele contener algunos alimentos ricos en FODMAP. La dieta mediterránea no está específicamente diseñada para personas con SII u otros problemas gastrointestinales, sino que se centra en el consumo de alimentos tradicionales de países ribereños del Mediterráneo, como España, Italia y Grecia.
Promueve el consumo de alimentos de origen vegetal, grasas saludables (en particular las presentes en el aceite de oliva), proteínas magras y lácteos bajos en grasa, a la vez que limita la ingesta de grasas saturadas y carnes rojas. A pesar de contener algunos alimentos ricos en FODMAP, existe una amplia variedad de alimentos que se pueden consumir mientras se siguen ambas dietas, entre ellos:
- Aceitunas y aceite de oliva
- pan de masa madre
- Nueces
- Almendras
- Pez
- Pollo magro
- naranjas
- Tomates
- Avena
- verduras de hoja verde
Las investigaciones sugieren que el consumo regular de la dieta mediterránea puede reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, favorecer niveles saludables de azúcar en sangre, reducir el colesterol y mantener un peso corporal saludable.
Antes de realizar cambios drásticos en su dieta para controlar el SII, se recomienda consultar con su médico de cabecera u otro profesional de la salud. Puede encontrar más información sobre el manejo de los síntomas del SII en el sitio web del NHS.
Daily Express