Estos 3 pueblos de Charente-Maritime le seducirán por su encanto único.

Es un bonito pueblo encaramado en un acantilado en un meandro del Charente, cuyas casas bordean el río. Saint-Savinien se explora mejor a pie, ya que sus calles estrechas y sinuosas son difíciles de recorrer en coche. Este pueblo, con toda su altura y desniveles, da fe de su rico pasado como puerto activo desde el siglo ^XIII . Desde aquí se transportaba piedra tallada de las canteras cercanas a toda Europa, desde Londres hasta Amberes. El pueblo también fue un importante cruce fluvial para el transporte de vino, madera y cereales producidos en el interior. Hoy en día, es principalmente un refugio para artistas y artesanos que reciben al público en sus galerías o talleres.

Saint-Sauvant

Este hermoso pueblo medieval, encaramado en un acantilado, domina el valle de Coran. Se puede llegar a pie por el GR, vía Saint-Césaire, tras pasar por antiguas granjas de setas y antiguas viviendas trogloditas excavadas en la roca. La señalización conduce a la iglesia de Saint-Sylvain, en el corazón de Saint-Sauvant. Un sendero con señalización verde permite descubrir el patrimonio del pueblo, cuyas encantadoras callejuelas conservan su trazado medieval, un lavadero-fuente y una torre defensiva del siglo ^XI , testimonio de la importancia económica del pueblo en la Edad Media. También se ha recreado un jardín medieval al pie del acantilado.