Un atropello en 2021 destapó un descubrimiento biológico sin precedentes que nunca tendría que haber ocurrido

Desafiar todo lo que conocemos no es algo que vemos todos los días, por eso el descubrimiento que se hizo en noviembre de 2021 en la región brasileña de Vacaria, sigue siendo recordado como un hecho sin precedentes que no se ha vuelto a repetir.
Todo comenzó con el atropello de lo que parecía un perro callejero, que al estar herido lo llevaron al veterinario para que lo curasen, sin embargo, al comenzar a analizar al animal, los doctores encontraron que no era un perro (aunque se parecía mucho), sino que era un animal que desafiaba todas las clasificaciones registradas en biología.
Esto es porque Dogxim, así lo llamaron, presentaba características morfológicas y de comportamiento extrañas, que obligaron a llevarlo ante un grupo de expertos científicos para encontrar el fondo del asunto. Si bien su cuerpo era como el de un zorro, su pelo y comportamiento, ladrada y jugaba con juguetes, era más de un canino.
Por ello, un grupo de investigadores brasileños decidió analizar al animal, encontrando algo que hasta ese momento se creía imposible, Dogxim era una mezcla entre perro y zorro, un híbrido entre ambas especies, que tenía 76 cromosomas, un número intermedio entre los 78 que tienen los perros domésticos y los 74 de los zorros que habitan en esas zonas.
"Nunca se había documentado una hibridación entre géneros tan lejanos en cánidos", explicaba Roland Kays, investigador del North Carolina Museum of Natural Sciences, para referirse a este híbrido de dos animales que se separaron evolutivamente hace 6,7 millones de años.
Para entender este fenómeno y cómo ocurrió, es esencial tener en cuenta el contexto medioambiental donde se encontró este animal, y es que dicha zona de Brasil es uno de los lugares más degradados del país, donde la creciente urbanización y la deforestación han provocado que animales silvestres y domésticos compartan espacio.
De ahí que surgiera un ejemplar como Dogxim, único en el mundo, aunque lo cierto es que este animal murió en 2023 por causas desconocidas. Desde entonces no se ha vuelto a registrar ningún tipo de híbrido similar, pero gracias a este descubrimiento que demostró que no era imposible, no se descarta que exista alguno más.
Eso sí, este descubrimiento pone en el foco cómo los humanos estamos impactando al planeta y sus seres, y aunque este ejemplar sea algo digno de estudio, lo cierto es que hay un lado muy negativo sobre todo desde el punto de vista de la protección y preservación de los zorros salvajes autóctonos.
eleconomista