¿Está terminando el reinado del vestido desnudo?

Style Points es una columna sobre cómo la moda se relaciona con el mundo en general.
Hace dos años, Irina Shayk desfiló en el Festival de Cine de Cannes en ropa interior. Bueno, más o menos. La supermodelo lució atrevidamente lencería con el monograma de Gucci y una capa transparente. Fue la misma temporada en la que diseñadores como Rick Owens , LaQuan Smith e incluso la siempre recatada Tory Burch lucieron looks transparentes en la pasarela, mientras la moda adoptaba la tendencia de mirarse al cuerpo tras el confinamiento.
Irina Shayk en un evento de Cannes en 2023.
Shayk en la alfombra roja de Cannes este año.
Este año, la moda en Cannes ha sido más discreta (Shayk lució un Armani Privé largo hasta el suelo). Se anunció un código de vestimenta muy comentado que prohibía implícitamente el vestido desnudo, un antiguo elemento básico del paso y repetición del festival. ("Por razones de decencia, la desnudez está prohibida en la alfombra roja, así como en cualquier otra área del festival", dice el comunicado oficial). Y aunque las reglas adicionales que prohibían las colas largas parecen haber desaparecido, en su mayor parte, la gente parece estar jugando con las reglas impulsadas por la "decencia". La miembro del jurado Halle Berry salió con un traje de falda de Chanel, mientras que Julia Garner lució un vestido de Gucci transparente, pero forrado, de acuerdo con el código de vestimenta. Incluso Bella Hadid, cuyos looks anteriores han sido la comidilla de Cannes, mantuvo las cosas bastante PG (Apta para todo público) en esta ocasión .
Halle Berry en Chanel en el Festival de Cine de Cannes.
Aunque Cannes es solo un evento en el carrusel de las celebridades, su alfombra roja hasta ahora parece reflejar una visión más sobria de la moda, influenciada por el auge del conservadurismo social, una renovada nostalgia por las siluetas retro y quizás un agotamiento generalizado ante la tendencia de mostrarlo todo. ¿Será este un evento en extinción para el vestido desnudo?
Mire la temporada de premios de este año, donde era menos probable ver gente con mallas de visión de rayos X y más probable ver a estrellas jóvenes vistiendo los atuendos retro con escote de corazón de sus predecesores de los años 50 y principios de los 60 (en algunos casos, literalmente, como con Elle Fanning y su recreación personalizada de un vestido de Balmain de 1953).
Elle Fanning en los Globos de Oro.
Cuando nuestros feeds están saturados de contenido de mujeres tradicionales y de visiones retrógradas del género, la vigilancia de lo que visten las mujeres y el repliegue hacia todo lo modesto no resultan sorprendentes, son parte de un repliegue cultural calculado hacia un pasado mítico.
También es posible que la prenda simplemente haya perdido su poder de impactar (después de todo, ¿cuántos titulares del Daily Mail puede sostener el ecosistema?). O que Ozempic y otros fármacos GLP-1 hayan cambiado nuestra relación con la ostentación. Hace una década, escribí sobre la idea del cuerpo de alta costura , en el que “el cuerpo es el nuevo atuendo. El gimnasio es el nuevo taller. Las curvas y hendiduras que una vez fueron esculpidas por la corsetería, las ballenas, las panniers, el relleno estratégico o incluso, más recientemente, Spanx, ahora son claramente evidentes”. Desde entonces, el péndulo ha vuelto a la era del Y2K, con la delgadez extrema valorada por encima de todo lo demás. Si el nuevo cuerpo ideal no es tan difícil de conseguir y cada vez es más alcanzable, ¿es realmente una prioridad exhibirlo de la misma manera?
Jeremy Strong en el Festival de Cine de Cannes.
En medio de todo el revuelo sobre lo que las actrices pueden y no pueden usar durante la promoción de sus películas, cabe destacar que no existen restricciones similares para la ropa masculina. En mi opinión, Jeremy Strong con un sombrero de pescador rosa y un traje informal de pana a juego resulta más objetable que otro vestido de red con efecto ilusión.
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