Planes para extender el impuesto al azúcar a los batidos
El impuesto al azúcar aplicado a las bebidas gaseosas se extenderá a los batidos y otras bebidas a base de leche según los nuevos planes del gobierno.
El gobierno está consultando sobre propuestas para poner fin a la exención del impuesto a las bebidas lácteas, así como a los sustitutos no lácteos como la avena o el arroz.
La ministra de Hacienda, Rachel Reeves, anunció en su presupuesto de otoño del año pasado que el gobierno estaba considerando ampliar el impuesto.
El ministro de Hacienda en la sombra, Mel Stride, calificó la medida como un "golpe bajo" para los hogares cuando el Partido Laborista "ya había aumentado el costo de vida para las familias".
El impuesto al azúcar, conocido formalmente como impuesto a la industria de las bebidas gaseosas (SDIL), se aplica a los fabricantes y fue introducido por el gobierno conservador en abril de 2018 como un medio para abordar la obesidad.
El lunes, el Tesoro también confirmó propuestas para reducir la cantidad máxima de azúcar permitida en las bebidas antes de que estén sujetas al impuesto, de 5 g a 4 g por 100 ml.
Unas 203 bebidas lácteas preenvasadas disponibles en el mercado, que representan el 93% de las ventas dentro de la categoría, se verán afectadas por el impuesto a menos que su contenido de azúcar se reduzca de acuerdo con las propuestas, según indica el análisis del gobierno.
La exención para las bebidas a base de leche se incluyó debido a las preocupaciones sobre el consumo de calcio, particularmente entre los niños.
El Tesoro dijo que los jóvenes sólo obtienen el 3,5% de su ingesta de calcio de estas bebidas, lo que significa que "también es probable que los beneficios para la salud no justifiquen los daños del exceso de azúcar".
"Al incorporar las bebidas a base de leche y las bebidas sustitutivas de la leche al SDIL, el gobierno introduciría un incentivo fiscal para que los fabricantes de estas bebidas aprovechen el progreso existente y reduzcan aún más el azúcar en sus recetas", dijo el Tesoro.
El gobierno estima que el 89% de los refrescos vendidos en el Reino Unido no están sujetos al impuesto debido a la reformulación generalizada por parte de los fabricantes desde 2018.
Pero agregó que el impuesto había creado efectivamente un "objetivo" justo por debajo del umbral de 5g y que, como resultado, los productos se habían agrupado por debajo de 5g.
La consulta gubernamental se desarrollará desde el lunes hasta el 21 de julio.
El SDIL ha recaudado un total de 1.900 millones de libras desde su implementación en 2018, según las estadísticas gubernamentales publicadas en septiembre del año pasado. Los ingresos de HMRC para el ejercicio fiscal 2023-24 ascendieron a 338 millones de libras.
Entre quienes se oponen al impuesto en los últimos años se encuentran la industria de las bebidas refrescantes, los pubs y las tiendas de bebidas alcohólicas. Algunos argumentan que el impuesto afecta desproporcionadamente a las familias con bajos ingresos y apenas contribuye a combatir la obesidad.
Sobre los últimos planes, el organismo industrial Federación de Alimentos y Bebidas dijo que agradecía la oportunidad de compartir sus puntos de vista en la consulta.
Señaló que ya se habían logrado "progresos significativos" y que "muchos años de inversión en investigación y desarrollo" habían reducido el azúcar en los refrescos en un 46% en los últimos cinco años, con una reducción del 30% en las bebidas lácteas preenvasadas en los últimos tres años.
Agregó que los fabricantes de alimentos y bebidas enfrentan una serie de presiones inflacionarias y pidió al gobierno "continuar creando las condiciones adecuadas para que las empresas innoven y también sean claras sobre sus objetivos a largo plazo para promover la confianza empresarial".
BBC
