Jacques Ferrandez, una obra para celebrar los esplendores eternos de su Argelia natal

data-modal-image-caption=Frente a la Bahía de los Ángeles, en Niza, al borde de este mar que también baña las costas de su tierra natal. data-modal-image-credit=Olivier Coret/ Le Figaro Magazin>
Instalado en Niza, el autor de los impresionantes Carnets d'Orient y de magníficas adaptaciones dibujadas de la obra de Albert Camus continúa contando a lápiz su patria perdida.
Hijos de la clara línea belga, de la cual Hergé y Edgar P. Jacobs fueron los padres, los tres Jacques —Tardi, Loustal y Ferrandez— impusieron cada uno un universo muy personal, a ratos alegre y a ratos melancólico, lleno de movimiento y emoción, al vincular su arte gráfico con un novelista. Tardi es Céline; Loustal , Simenon y Ferrandez , Camus. «Porque era él, porque era yo…». Solo las categorías de lo inexpresable, lo irreductible, pueden evocar encuentros de tal importancia en la vida de un artista, tan exclusivos y decisivos como el amor loco o las grandes amistades.
Cuando hablamos de Albert Camus con Jacques Ferrandez, de quien enmarcó El extranjero, El primer hombre y El huésped (Gallimard), un relato corto de la colección El exilio y el reino, nos sorprende ver que su seducción sigue operando como el primer día. Esta es la esencia de la gracia. Y Albert Camus, quien dedicó su tesis de grado a San Agustín...
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