En Cannes se ha hablado mucho del nuevo código de vestimenta (y no siempre para bien)
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Los escotes escandalosos, la desnudez y la exuberancia ya no tienen cabida en la alfombra roja de Cannes. Una nueva norma que impuso una sobriedad inédita y beneficiosa, no sin provocar algunas turbulencias.
Olvídate de los vestidos escotados que llegan hasta el ombligo, de la transparencia que vuelve locos a los algoritmos de las redes sociales y seduce a los fotógrafos. Olvidemos también los interminables trenes que hay que desenrollar sin descanso antes de cada subida de escaleras: el dress code de la 78ª edición del Festival de Cannes ha sacudido el programa.
Este año, el nuevo código de vestimenta del festival implicaba, "por razones de decencia", la prohibición de...
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