China, que recibe este jueves a los ministros de Defensa de Irán y Rusia, se presenta como defensora de la paz

La reunión en la ciudad costera oriental de Qingdao se produce tras la entrada en vigor el martes de un alto el fuego entre Israel e Irán, miembro de la OCS. También se produce un día después de la cumbre de líderes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en La Haya, donde los miembros acordaron aumentar su gasto en defensa en consonancia con las exigencias del presidente estadounidense Donald Trump.

El ministro de Defensa chino, Dong Jun, describió el jueves la reunión en Qingdao, sede de una importante base naval china, como un contrapeso a un mundo dominado por el "caos y la inestabilidad".

"Los cambios cruciales para el siglo se están acelerando, el unilateralismo y el proteccionismo están aumentando", dijo Dong Jun el miércoles en presencia de los ministros de Defensa de Rusia, Irán, Pakistán, Bielorrusia y otros países, según la agencia de noticias estatal Xinhua.

"Los actos de hegemonía, dominación e intimidación socavan gravemente el orden internacional", afirmó, instando a sus homólogos a "actuar con mayor vigor para salvaguardar colectivamente el entorno propicio para el desarrollo pacífico".

Beijing ha buscado durante mucho tiempo presentar a la OCS de 10 miembros como un contrapeso a los bloques de poder aliados de Estados Unidos, incluso fomentando la colaboración política, de seguridad, comercial y científica.

Doble juego chino

En el marco de la reunión con su homólogo chino, el ministro de Defensa ruso, Andrei Belousov, elogió las relaciones con China, calificándolas de "nivel sin precedentes". "Las relaciones amistosas entre nuestros países mantienen una dinámica ascendente de desarrollo en todas las direcciones", afirmó.