¿Pronto tendremos robots humanoides capaces de doblar la ropa y guardar los platos en nuestros hogares?

¿Qué pasaría si, al llegar a casa del trabajo, un robot ya hubiera doblado la ropa, guardado la compra y vaciado el lavavajillas? Este escenario de ciencia ficción se está haciendo realidad gracias a Figure AI, una startup de Silicon Valley que desarrolla robots humanoides capaces de realizar diversas tareas domésticas.
A diferencia de los robots especializados (aspiradoras, cortacéspedes, etc.), los robots de Figure tienen dos brazos, dos piernas y una cabeza, lo que les permite imitar gestos humanos. En demostraciones recientes, se les puede ver doblando toallas, guardando platos e incluso reponiendo la compra.
El desafío es significativo: manipular objetos blandos o inestables es extremadamente complejo para una máquina, pero los avances en destreza e inteligencia artificial permiten ahora a estos robots comprender su entorno, analizar instrucciones habladas y actuar sin una programación específica.
El objetivo es ambicioso: crear un robot capaz de realizar cualquier tarea manual, desde limpiar hasta cocinar o montar muebles. Por ahora, estos humanoides se están probando en la industria, especialmente en BMW para el montaje y pronto en UPS para la logística. Pero Figure se centra claramente en los hogares.
Estos robots aún no son perfectos: autonomía limitada, movimientos algo rígidos, velocidad por mejorar... Sin embargo, las primeras pruebas reales están programadas para comenzar este año, dos años antes de lo previsto. La compañía espera desplegar 100.000 en cuatro años.
El precio sigue siendo desconocido, pero modelos de la competencia, como el Optimus (Tesla) o el H1 (Unitree), oscilan entre 15.000 y 20.000 euros. Esto sugiere una rápida democratización, a pesar de las cuestiones de seguridad, fiabilidad... y el espacio que queda para los humanos.
RMC